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El Redescubrimiento


A lo largo de la vida nos enseñan y aprendemos normas, leyes y costumbres que nos estructuran y nos enmarcan de acuerdo a los hábitos familiares y al contexto sociocultural del que hacemos parte. Pero que sería de nosotros los adultos si nos comportáramos como niños, que fuéramos inocentes, ingenuos, solidarios, que expresáramos realmente lo que pensamos y lo que sentimos como lo hacen ellos.

Son tantas las cosas que ahora mismo quisiera expresar, mi mente no para de disparar ideas, sin embargo continuando con la introducción del texto. En mi experiencia como madre de una niña de 3 años quien desde antes de poder hablar correctamente intentaba construir diálogos sobre lo sorprendente que es el mundo para ella y para quienes vivimos en él desde hace algunos años, y sin embargo nos parece totalmente normal. Poder ver un amanecer, un atardecer, el día, la noche, e infinidad de cosas y situaciones vividas por primera vez y que expresa con tal naturalidad que le agradezco todos los días a la vida, a Dios y al universo por permitirme aprender de nuevo con ella.

Que en este proceso de mostrarle el mundo que nos rodea estoy redescubriendo mi mundo y de esté algunas cosas me gustan y en cambio otras no tanto, que empiezo a descubrir el para qué de cada cosa vivida, la enseñanza que han dejado todas las personas que han pasado por mi vida y lo que he aprendido de quienes han estado desde siempre, a quienes llamo familia.

En este redescubrimiento he puesto aprueba mis valores y mi ética tanto personal como profesional, y es donde me doy cuenta que hago parte de un sistema y que estoy biológicamente programada para sobrevivir económicamente de mi profesión y mis talentos, de la carrera universitaria que curse y de la experiencia profesional adquirida como lo indica mi hoja de vida. Ahora que pasa cuando siento que esto que hago si bien beneficia a muchos no es exactamente lo que quería, porque la sensación es solo el deber cumplido y no la satisfacción de trascender.

Es posible que en este maravilloso proceso he descubierto las señales que la vida me ha enviado desde hace ya muchos años y por alguna razón no percibía, con frecuencia pero por temporadas he padecido de migraña y solo hasta ahora descubro las coincidencias en cuanto a las circunstancias en las que he estado en cada episodio, es decir que mi cuerpo se ha estado revelando en cada una de estas situaciones de estrés y en las que no he sentido la satisfacción de trascender con lo que hago.

Por otro lado descubro que nada en la vida es casualidad, descubro que todo lo sucedido tiene un propósito y depende de nosotros mismos descubrir esa intención o simplemente quedarnos en quejarnos de lo sucedido y son muchas más las señales que me llevan a concluir que debo potencializar las capacidades que he desarrollado a lo largo de mi vida y con las que he nacido, por lo tanto por ahora es mi propósito seguir en este camino de descubrimiento, de despertar y encarrilar mi pasión a la misión que tengo en mi vida.

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